En realidad, el Dr. Filiberto Vázquez Barroso, que tenía más visión que Elías, reconocía que debido al crecimiento de la población del mineral, era urgente tener control sobre la gente que arribaba a Cananea, pues era notorio que se hacían más frecuentes los delitos y las faltas al reglamento policiaco. La cárcel existente, además de ser muy pequeña (5 metros cuadrados), no contaba con las especificaciones arquitectónicas de una prisión, pues frecuentemente había fuga de reos. Es así que el Gobernador Rafael Izábal, autoriza la construcción de la hoy Antigua Cárcel de Cananea.
De esta manera, se iniciaron los trabajos para la construcción del edificio de la Cárcel de Cananea y las recomendaciones que se hicieron, fueron que los materiales de construcción(piedras, ladrillo, hierro, madera, cal, arena y cemento) debían de ser de la mejor calidad y que todos los albañiles y trabajadores fueran expertos en sus oficios.
En el año de 1979 la famosa Cárcel de Cananea concluye su historia como centro de readaptación social; para ofrecer, a partir de 1980, historia, arte y cultura, convirtiéndose así en Museo de la Lucha Obrera.
Voy a dar un por menor
De lo que a mí me ha pasado
Que me hayan tomado preso
Siendo un gallo tan jugado.
Me fui para el agua prieta
Ha ver si me conocían
A las once de la noche
Me Aprehendió la policía.
Me Aprehendieron los gendarmes
Al estilo americano y
Como era hombre de delito
Todos con pistola en mano.
Me llevan a Cananea
Atravesando a la sierra
No me les pude escapar
Por no conocer la tierra.
Al llegar a Cananea
Allí perdí la esperanza
Porque luego fui entregado
Al juez de primera instancia.
Me trajeron esposado
Me entregaron a la ley
Porque iba ser entregado
Al señor don José Rey.
Me pusieron procesado
En un frío calabozo
Me pusieron guardias dobles
Soldados de dos en dos.
A las diez de la mañana
Me lavaba la cabeza
Porque iba ser presentado
Al señor Don Fidencio Meza.
Me sacaron un escrito
De la casa del congreso
Donde me pregunta al juez
Sabe usted porque está preso.
Luego yo le contesté
Si no sabe yo si sé
Si señor aquí estoy preso
Por unos tres que mate.
Me siguieron preguntando
Y contesté muy formal
No me han de formar un templo
Ni un palacio de cristal.
De tres amigos que tengo
Ninguno me quiso hablar
Comenzando con el chango
El osito y el caimán.
La cárcel de Cananea
Está situada en una mesa
Donde yo fui procesado
Por causa de mi torpeza.
Despedida no les doy
Porque no la traigo aquí
Sé la deje al santo niño
Y al señor de Mapimí
Sé las deje a mis amigos
Paque se acuerden de mí.
(Autor Anónimo...)
Museo de la Lucha Obrera
Museo "La Carcel de Cananea", Tercera Este SN-S Cementerio Viejo 84620 Cananea Son., Tercera Este SN-S, Cementerio Viejo, Cananea, Son.
¡Llámanos! +52 645 332 0387
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